La crisis del matrimonio termina, en su aspecto legal, con una sentencia de divorcio en la que se regulan las medidas paterno filiales y las relaciones económicas entre los cónyuges. Pero, para terminar de verdad, hay que repartir los bienes y las deudas que existan en ese momento.

Liquidar la sociedad de gananciales puede ser fácil, si se pone sentido común y se mira con perspectiva. Mantener procedimientos abiertos a lo largo del tiempo genera un desgaste personal y económico que no compensa. Por ello, la primera recomendación es siempre la liquidación consensual y en esta obra se comentan todas las cuestiones que deben conocerse para finalizarla de manera eficaz evitando problemas de futuro.

Si no se consigue ese acuerdo no queda más opción que iniciar el temido procedimiento contencioso de liquidación de la sociedad de gananciales que puede eternizarse en el tiempo si uno de los cónyuges decide oponerse y recurrirlo todo, porque la lentitud de los Juzgados está a su favor.

En la presente obra se estudian con precisión las innumerables incidencias procesales que día a día se presentan en el curso de las dos fases del procedimiento: la de inventario y la propia de liquidación.

Un mundo jurídico en el que, a veces, la realidad supera a la ficción, y donde la improvisación está a la orden del día ante la ausencia, en numerosas ocasiones, de una regulación legal que es suplida por la jurisprudencia del Tribunal Supremo.

Se incluyen tres anexos. El primero presenta unas guías prácticas que sintetizan la problemática que puede presentarse y ofrecen las indicaciones oportunas para solventarla. El segundo contiene una sección de casos prácticos. Y el tercer anexo incluye unos formularios que ayudan a comprender mejor el proceso de liquidación.

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